El aire que respiran muchos ciudadanos europeos deteriora gravemente su salud; parece que poco importa
La vida en la ciudad es un compendio de placeres y peajes. La convivencia se estructura en torno a las relaciones humanas pero cada vez inciden más en la vida del urbanita los problemas ambientales, en concreto los asociados a la salubridad del aire que respiran. Científicos del Instituto Internacional de Análisis de Sistemas Aplicados predicen que para el año 2030, muchas ciudades europeas se enfrentarán a niveles de contaminación atmosférica muy por encima de los límites establecidos por la OMS y la UE. Echen un vistazo al mapa. El problema no es exclusivamente europeo. Si lo desea puede saber cómo está el aire por el mundo desde aquí. Algunas medidas se van tomando por aquí, como el plan que se propone para el área metropolitana de Barcelona, pero queda mucho por hacer. Algunos abogan por la protección mediante bosques; otros proponen limitaciones de velocidad y restricciones al tráfico. Mientras esto llega la UE urge a España para que en dos meses se ponga en marcha un plan para reducir la alta contaminación en Madrid y Barcelona. Por desgracia, no son las únicas ciudades en donde vivir supone un riesgo debido a la calidad del aire que se respira. ¿Qué estaría dispuesto-a a hacer para que mejorase la calidad del aire de su ciudad?